"Resiliencia: Una luz ante la tormenta"// "Resilience: A light in the face of the storm". [Esp-Eng]

Hablar de la resiliencia hace unos años atrás quizás habría sido algo con poca profundidad de aplicación y entendimiento, llegando a plantear el concepto de una palabra desconocida para muchos, pero que ahora ha sido un tema totalmente a tono con nuestra actualidad. Resiliencia Es sinónimo de lucha y superación, esa capacidad que muchos hemos tenido que asumir ante los cambios de este mundo que parecen cada día ir de mal en peor.

Ya sea por causas internas o externas, la resiliencia siempre ha sido parte de nuestra vida, solo que ahora los problemas y las dificultades llegan a ser tan grandes y consecuentes, que nos han empujado a ser personas que debemos esforzarnos al máximo si queremos seguir adelante y alcanzar nuestros objetivos. Tal como nadie puede escapar de las dificultades, así mismo la resiliencia ha sido esa válvula de oxígeno que mucho hemos necesitado y utilizado con tal de no rendirnos ante nada.

La crisis económica, los desastres naturales y las enfermedades, son tan solo algunos de los agentes en los que la resiliencia sale al rescate por nosotros. Pero desde mi opinión, pienso que la pandemia que hace poco nos azotó fue sin duda el escenario ideal para cultivar o fortalecer una cualidad como la resiliencia. La mayoría nunca antes había vivido una situación tan apremiante como lo fue esta pandemia, y por ende muchos sufrieron graves consecuencias que hasta hoy siguen haciendo mucho daño en sentido mental físico y emocional.

Talking about resilience a few years ago perhaps would have been something with little depth of application and understanding, coming to raise the concept of a word unknown to many, but now has been a topic fully in tune with our present. Resilience is synonymous of struggle and overcoming, that capacity that many of us have had to assume in the face of the changes of this world that seem to go from bad to worse every day.

Whether due to internal or external causes, resilience has always been part of our lives, only now the problems and difficulties have become so great and consequent that they have pushed us to be people who must do our best if we want to move forward and achieve our goals. Just as no one can escape from difficulties, so resilience has been that oxygen valve that we have needed and used a lot in order to not give up in the face of anything.

The economic crisis, natural disasters and diseases are just some of the agents in which resilience comes to the rescue for us. But in my opinion, I think that the pandemic that recently hit us was undoubtedly the ideal scenario to cultivate or strengthen a quality such as resilience. Most of us had never before experienced a situation as pressing as this pandemic, and therefore many of us suffered serious consequences that to this day continue to do much damage in a mental, physical and emotional sense.

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Vivir en un país donde la situación económica es bastante deficiente también nos lleva al mismo plan de defensa, uno en el que la primera línea de batalla debe estar bien reforzado con la resiliencia. Por ejemplo, aquí en Venezuela yo he sido espectador y también protagonista sobre este asunto. Muchas personas han tenido que hacer cambios uno tras otro a fin de obtener la estabilidad y el bienestar deseados por todos. Otros han tenido que salir de su zona de confort y buscar varias opciones que probablemente en otro ámbito habrían rechazado con total determinación y prontitud.

Pero con todo y esto, las situaciones difíciles han sacado lo mejor de nosotros, dejando en evidencia habilidades que hasta hace poco desconocíamos o subestimábamos por el simple hecho de no afrontar algún problema, y que ahora gracias a la resiliencia hemos podido salir victoriosos sumando aprendizaje y experiencia en el trayecto. Llegamos a dejar de hacer lo que mejor sabíamos y lo cambiamos por algo nuevo y diferente que a la larga nos ha hecho mejores personas y más preparadas para cualquier adversidad.

Desde mi vivencia, debo admitir que por algún tiempo no desplegué resiliencia ante situaciones determinadas en mi vida y que fueron marcando un camino lleno de desánimo y tristeza. No fue sino hasta hace unos pocos años cuando reflexioné en el asunto y me di cuenta que, cuando pasamos por serias dificultades es cuando más valor debemos tener para seguir, porque rendirse no remediará nada y solo quedará una frustración acumulada que luego se convertirá en una pesada carga difícil de soltar.

Living in a country where the economic situation is quite poor also leads us to the same defense plan, one in which the first line of battle must be well reinforced with resilience. For example, here in Venezuela I have been a spectator and also a protagonist on this issue. Many people have had to make changes one after another in order to obtain the stability and well being desired by all. Others have had to get out of their comfort zone and look for various options that probably in another environment they would have rejected with full determination and promptness.

But with all this, difficult situations have brought out the best in us, revealing skills that until recently we were unaware of or underestimated for the simple fact of not facing a problem, and that now thanks to resilience we have been able to emerge victorious, adding learning and experience along the way. We even stopped doing what we knew best and changed it for something new and different, which in the long run has made us better people and more prepared for any adversity.

From my own experience, I must admit that for some time I did not display resilience in the face of certain situations in my life that marked a path full of discouragement and sadness. It was not until a few years ago when I reflected on the matter and realized that, when we go through serious difficulties is when we must have more courage to continue, because giving up will not remedy anything and there will only be an accumulated frustration that will later become a heavy burden difficult to release.

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“Los momentos más duros en nuestra vida pueden sacar lo mejor que hay en nosotros”. Esa es una realidad en la que mucho nos identificamos cuando actuamos en base a la resiliencia, realidad que nos sirve de trampolín y nos ayuda a no desistir. A nivel emocional nos brinda optimismo y felicidad, algo que en nuestros tiempos llega a ser tan valioso como el mismo oro. En el plano personal nos sentimos útiles y dispuestos a aceptar cualquier asignación o tarea a fin de no rendirnos, llegando a ser tan valientes como capacitados ante el peor de los panoramas.

¿Cuán importante puede llegar a ser la resiliencia en nuestra vida? Esa es una pregunta tan retórica como interesante por el hecho de estar relacionado con nuestra toma de decisiones. La resiliencia puede orientar nuestras ideas y esfuerzos hacia un punto en el que podamos elegir sin temor al fracaso, sino más bien con la certeza de que estamos escogiendo de la mejor manera posible. Tal como una luz en plena tormenta, así la resiliencia puede llevar nuestro barco al puerto más seguro que puede existir, llenando de mucha tranquilidad y paz.

A medida que vaya pasando el tiempo, las situaciones irán desmejorando, y será la resiliencia una herramienta fundamental para no dejarnos caer. Así que podemos decir que cada situación que estemos enfrentando ahora, sea grande o pequeña, es sin duda una oportunidad para cultivar y afianzar la resiliencia en nuestra vida.

"The hardest moments in our lives can bring out the best in us". This is a reality that we identify with when we act based on resilience, a reality that serves as a springboard and helps us not to give up. On an emotional level it gives us optimism and happiness, something that in our times becomes as valuable as gold itself. On a personal level, we feel useful and willing to accept any assignment or task in order not to give up, becoming as brave as we are capable in the worst of scenarios.

How important can resilience become in our lives? That is a question that is as rhetorical as it is interesting in that it relates to our decision making. Resilience can guide our ideas and efforts to a point where we can choose without fear of failure, but rather with the certainty that we are choosing in the best possible way. Like a light in the midst of a storm, so resilience can bring our ship to the safest harbor it can be, filling us with much tranquility and peace.

As time goes by, situations will deteriorate, and resilience will be a fundamental tool to keep us from falling. So we can say that every situation we are facing now, whether big or small, is undoubtedly an opportunity to cultivate and strengthen resilience in our lives.

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