Preocupación: Mi primera consulta oftalmológica

Saludos queridos amigos, hoy quiero contarles sobre una nueva experiencia en mi vida que me llenó de una serie de emociones y sentimientos encontrados, debido a los problemas que estaba presentando con mis ojos.

Desde hace algunos meses, comencé a notar que algo no estaba bien con mi vista, lo que por desconocimiento ignoré, dejando de lado el contarle a mis padres y el preocuparme por ir al médico especialista para que determinara lo que estaba pasando. Puede que sea por mi juventud, o tal vez la irresponsabilidad que caracteriza a un adolescente en plena formación de vida, ambos inclusive influyeron para no tomar en cuenta las miles de señales de alerta que mi cuerpo emitía, para avisarme que mi visión se estaba deteriorando.

De hecho, debo comentarles que nunca pensé que mi capacidad de ver se disminuyera de forma tan rápida. Yo siempre acostumbré sentarme aproximadamente en la mitad del salón, desde donde podía ver con algo de normalidad lo que los profesores escribían en la pizarra, pero esa realidad fue cambiando día tras día, sin que me percatara de ello, casi inconscientemente decidí ubicarme cada vez más pegado de la pared principal de aula para poder copiar las tareas, en tan solo unos 10 meses, fui avanzando de puesto, desde la quinta fila hasta la primera, incluso más cerca, casi que me sentaba en el escritorio del maestro para observar los escritos.

Mis ojos empezaron a fallar, de eso no hay duda, las cosas se veían borrosas, ya no podía leer ni siquiera los letreros de los baños, los cuales, como saben, suelen ser bastante grandes, solamente detallaba las cosas cuando estaban muy cerca, aun así no entendía lo que le ocurría a mi cuerpo y tampoco le di importancia, o tal vez lo pasé por alto, por no entender la situación, pero en todo caso, reconozco que tuve un grado de responsabilidad al no tomar los correctivos a tiempo.

El problema de mi visión se siguió agravando al no tomar las acciones médicas necesarias, eso fue avanzando hasta que empezaron los dolores de cabeza, el enrojecimiento de los ojos y una puntada, que casi me hacía tirarme al piso del dolor por estar forzando la vista, En ese momento me di cuenta de que las cosas no eran normales, mi visión aún de día era borrosa, ya no podía durar horas mirando la computadora, apenas unos 20 minutos frente al monitor en cualquier juego, eran suficientes para que mi mis ojos se irritaran, fue allí cuando surgió la preocupación por lo que me estaba ocurriendo, realmente nunca pensé que algo tan tonto pudiera afectarme a tal punto que incluso llegué a sentir mareos y ganas de vomitar.

Preocupado tras pasar una semana terrible con los síntomas en pleno afloramiento, decidí hablar con mis padres y pedirles que me llevaran al médico de los ojos, para chequearme y evaluar que me estaba sucediendo. Esto requirió de un gran esfuerzo económico y juntar algo de dinero, que no se logró tener de inmediato para asistir a la consulta, así que tuve que esperar más o menos una semana aplicándome colirios y guardando reposo, hasta que mi papá cobró y pudo completar para pagar la cita médica que costó carísima, casi 70 $ en la clínica de los ojos, donde un médico especialista me realizó la evaluación.

En este punto, el nerviosismo recorría todo mi cuerpo y la preocupación por el dolor en los ojos me hacía casi comerme las uñas, incluso el miedo se apoderó de mí, por no saber con claridad lo que estaba pasando. Afortunadamente, me tocó ser evaluado por un médico muy profesional que me realizó todos los exámenes necesarios para dar un diagnóstico certero, por cierto que aunque de forma amable me gané mi buen regaño, por no comunicar a tiempo los síntomas que sentía en mi vista, esa es una lección de vida que aprendí de todo esto, por suerte el problema básicamente se centra en dos afecciones bastante comunes en chicos de mi edad, por el excesivo uso de equipos de computación, teléfonos, pantallas y miles de cosas más que inciden para desarrollar astigmatismo.

El diagnóstico final fue que debo usar lentes de forma permanente para corregir el problema, lo cual implica un gasto adicional en dinero no planificado para poder mejorarme en varios pasos.

Espero les gustara mi forma de contarles esta experiencia y el cómo las emociones y los sentimientos jugaron un papel bastante importante en el desarrollo de los acontecimientos.

Concern: My first ophthalmologic consultation

Greetings dear friends, today I want to tell you about a new experience in my life that filled me with a series of emotions and mixed feelings, due to the problems I was having with my eyes.

A few months ago, I began to notice that something was not right with my eyesight, which I ignored out of ignorance, leaving aside telling my parents and worrying about going to a medical specialist to determine what was going on. Maybe it was my youth, or perhaps the irresponsibility that characterizes a teenager in the full formation of life, both influenced me not to take into account the thousands of warning signals that my body emitted, to warn me that my vision was deteriorating.

I must tell you that I never thought that my ability to see would diminish so rapidly. I always used to sit approximately in the middle of the classroom, from where I could see with some normality what the teachers wrote on the blackboard, but that reality was changing day after day, without me noticing it, almost unconsciously I decided to place myself closer to the main wall of the classroom to be able to copy the assignments, in just about 10 months, I was advancing from the fifth row to the first, even closer, almost sitting on the teacher's desk to observe the writings.

My eyes began to fail, there is no doubt about that, things looked blurry, I could no longer read even the signs in the bathrooms which, as you know, are usually quite large, I could only detail things when they were very close, even so, I did not understand what was happening to my body and I did not give it importance, or maybe I overlooked it, for not understanding the situation, but in any case, I recognize that I had a degree of responsibility for not taking corrective measures in time.

The problem of my vision continued to worsen by not taking the necessary medical actions, that was progressing until the headaches began, the reddening of the eyes, and a stitch, which almost made me throw myself to the floor in pain to be forcing the view, At that time I realized that things were not normal, my vision even in the daytime was blurred, I could no longer last hours looking at the computer, just about 20 minutes in front of the monitor in any game, was enough for my eyes to get irritated, that was when I became worried about what was happening to me, I never thought that something so silly could affect me to such an extent that I even felt dizzy and wanted to vomit.

Worried after spending a terrible week with the symptoms in full bloom, I decided to talk to my parents and ask them to take me to the eye doctor, to check me and evaluate what was happening to me. This required a great economic effort to gather some money, which was not immediately available to attend the consultation, so I had to wait about a week applying eye drops and rest until my dad got paid and could complete paying for the medical appointment that cost very expensive, almost $70 in the eye clinic, where a specialist doctor made the evaluation.

At this point, nervousness ran through my whole body and the worry about the pain in my eyes made me almost bite my nails, even fear took over me, for not knowing clearly what was happening. Fortunately, I had to be evaluated by a very professional doctor who performed all the necessary tests to give an accurate diagnosis, by the way, that although kindly I earned a good scolding, for not communicating in time the symptoms I felt in my eyesight, that is a life lesson I learned from all this, luckily the problem focuses on two fairly common conditions in kids my age, by excessive use of computer equipment, phones, screens, and thousands of things that affect to develop astigmatism.

The final diagnosis was that I must use glasses permanently to correct the difficulty, which implies an additional expense in money not planned to be able to improve myself in several steps.

I hope you liked my way of telling you about this experience and how emotions and feelings played a very important role in the development of the events.

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