No sabemos los sentimientos que alberga un corazón porque no estamos dentro de él, mucho menos podemos saber lo que piensa cada quien, pero si algo podemos hacer es, cambiar desde adentro si queremos que la situación cambie.

Lo mejor que podemos hacer es dar el ejemplo y dejar que los demás continúen su mundo como está, que así como el agua, tarde o temprano encontrarán su cause.

Mucho nos hiere que nos señalen, nos culpen y nos inventen calumnias mediante el sentimiento de la envidia, eso habla mucho de lo que esas personas guardan en su corazón, sus sentimientos y sus pensamientos, hasta el modo de vida, la educación y trato que han tenido en su familia.

Cuando alguien te hiere lo más probable es que otro alguien lo ha herido, cae en una situación inmadura que quiere vengarse, no importa si arrastra un inocente con él, cuando lo haga tal vez se sienta bien en el momento pero algún día su conciencia le pasara cuentas. Nuestro rol aquí no es ser señalador ni verdugo, sino aprender de la experiencia y saber lo que no debemos hacer.

Cuando alguien viene a ti con un un sentimiento negativo jamás producirá efectos positivos, cuando alguien hiere tus sentimientos, lo mas sano y maduro es aislarte en silencio y dejarlo pasar, por más difícil que parezca todos los días es un buen día para empezar. Precavido, consciente, cada día queriéndote más.

Si muchos tiran rocas en tu camino para que tropieces, se burlan para que se quiebre tu fe, fortalecerte a ti mismo usa las piedras no para lanzarlas en efecto rebote, sino para construir tu propia escalera que te ayudará a superarte cada día más.

Cada quien tiene su propia forma para superar los obstáculos, lo que todos tenemos en común es no permitir estancarnos y actuar con madurez, saber cuando alejarse, saber cuando nos equivocamos y saber cuando tenemos que rectificar.

Mientras más nos enfocamos en el sentimiento que nos deja tras la traición o decepción que alguien nos ocasionó, más nos costará superarlo. Por un tiempo estarás triste y oprimido, pero no te permitas permanecer así por mucho tiempo, pues la oportunidades que nuevas que tienes para volver a estar bien y sonreír, las estarías perdiendo, camina un paso a la vez y a tu propio ritmo.