Enamórate de tu emprendimiento | Fall in love with your venture

Saludos. La amiga @lilianajimenez en su publicación para la comunidad @beentrepreneur nos deja la invitación a reflexionar sobre cómo vamos desarrollando nuestro emprendimiento. Les comento…

Hace un poco más de un año mi amiga María me buscó para conversar sobre su idea de comenzar un negocio. Un paso que a la mayoría de las personas les genera dudas, sobre todo si son como ella que no cuentan con experiencias previas.

Ella tenía tiempo pensando el asunto y entre las tantas opciones que se había planteado la que le creó más entusiasmo fue montar una heladería en un pequeño local de la avenida.

Para explorar sus fortalezas y debilidades lo primero que le pregunté fue por qué ese negocio y no otro. A veces las personas se enamoran de una idea sin antes valorar previamente las condiciones de su factibilidad.

María había meditado sobre esto. Me dijo que su abuela en algún momento había vendido helados en su casa y de aquel tiempo conservaba una máquina que todavía estaba operativa. Además, tenía unas cuantas fórmulas que le había dado resultado. Estaba claro que no arrancaría desde cero, lo que sin duda era un buen punto a su favor.

Luego le comenté que en la zona había varios negocios que vendían helados con precios bastantes razonables, ya que eso podría ser un punto en contra a la idea de la heladería.

Pero María también había pensado en eso, su idea era distinta a lo que había en la zona. Ella quería ofrecer un sitio donde la gente pudiera pasar un rato conversando mientras comía su helado. Para ello dispondría de algunas mesas y quizá más adelante podría ofrecer cosas nuevas.

Tal como lo había planteado el proyecto se veía atractivo y factible porque era verdad que en la zona no había nada parecido y quizá hubiese un público para ese negocio. Pero eso no se sabría hasta el momento de su inicio…

María arrancó su negocio con un pequeño mostrador-cava donde ofrecía su variedad de helados y dos mesas de plástico con cuatro sillas cada una. En los primeros cuatro meses solo vendía barquillas y tinitas. Tampoco contaba para ese momento con internet, por lo que los pagos debían hacerse en un negocio cercano.

Todo el dinero que fue ingresando en los primeros meses María lo destinó a reponer inventarios y a mejorar el negocio, realmente estaba enamorada de su proyecto. Paso a paso le fue cambiando totalmente el aspecto.

Lo primero que hizo fue contratar un servicio de internet, eso facilitó el pago de los clientes, las personas se sentían más cómodas al no tener que moverse a otro sitio para cancelar la cuenta.

Luego cambió el concepto de las mesas, quitó las mesas de plástico y las sustituyó por pequeñas mesas de madera con dos sillas cada una. Se había dado cuenta que iban muchas parejas a comer helados y que la mesa para dos les resultaba más atractiva, más íntima. Cuando iban grupos grandes sencillamente movía las mesas y las sillas.

Antes de cumplir el primer año ya había cambiado completamente la decoración y la oferta de sus productos.

En la parte interna había re decorado con paneles de madera, luces de neón, ambiente musical, y fotografías en formato grande. La gran novedad en la parte exterior fue la instalación de un colchón inflable para los niños, que agregó otro atractivo y estimuló la visita de grupos más numerosos.

Su oferta de productos creció sustancialmente. A las tinitas y barquillas se sumaron preparaciones más elaboradas que incluían galletas de diferentes tamaños, topping diversos, y arreglos atractivos a la vista y al gusto…

En su mente María siempre está imaginando la manera de mejorar su negocio, cada vez que hablamos me comenta sobre alguna novedad que se le ha ocurrido. No me extrañaría que en poco tiempo busque establecer un negocio similar en otra zona y quizá hasta llegue a convertirse en una franquicia. Son las cosas que pasan cuando la gente se enamora a sus proyectos y trabaja con disciplina y constancia.

Gracias por tu tiempo.

Fuente de imágenes. I II III

Greetings. The friend @lilianajimenez in her publication for the @beentrepreneur community leaves us the invitation to reflect on how we are developing our entrepreneurship. Let me tell you...

A little over a year ago my friend Maria reached out to me to talk about her idea of starting a business. A step that most people have doubts about, especially if they are like her and have no previous experience.

She had been thinking about it for some time and among the many options she had considered, the one she was most excited about was to start an ice cream parlor in a small shop on the avenue.

To explore her strengths and weaknesses, the first thing I asked her was why this business and not another. Sometimes people fall in love with an idea without first assessing the conditions of its feasibility.

Maria had thought about this. She told me that her grandmother had once sold ice cream in her house and from that time she kept a machine that was still working. In addition, she had a few formulas that had worked for her. It was clear that he would not start from scratch, which was certainly a good point in his favor.

Then I told him that in the area there were several businesses that sold ice cream at quite reasonable prices, as that could be a point against the idea of the ice cream shop.

But Maria had thought about that too, her idea was different from what was in the area. She wanted to offer a place where people could spend some time chatting while eating their ice cream. For this she would have some tables and maybe later she could offer new things.

As she had proposed it, the project looked attractive and feasible because it was true that there was nothing like it in the area and perhaps there would be an audience for such a business. But that would not be known until the moment of its inception...

Maria started her business with a small counter-bar where she offered her variety of ice cream and two plastic tables with four chairs each. In the first four months, she only had ice cream bars and tinitas. At that time he did not have internet, so payments had to be made at a nearby business.

All the money that came in during the first months María used it to replenish inventories and improve the business, she was really in love with her project. Step by step she changed the whole aspect of the business.

The first thing she did was to hire an internet service, which made it easier for customers to pay, people felt more comfortable not having to move to another place to pay the bill.

Then he changed the concept of the tables, removing the plastic tables and replacing them with small wooden tables with two chairs each. He had noticed that many couples went to eat ice cream and that the table for two was more attractive, more intimate. When larger groups came, he simply moved the tables and chairs.
Before the first year had passed, he had already completely changed the decoration and the product offering.

The inside had been redecorated with wood paneling, neon lights, musical ambiance, and large-format photographs. The great novelty on the outside was the installation of an inflatable mattress for children, which added another attraction and stimulated the visit of larger groups.

Its product offering grew substantially. In addition to the tinitas and barquillas, more elaborate preparations were added, including cookies of different sizes, various toppings, and attractive arrangements to the eye and taste...

In her mind Maria is always thinking of ways to improve her business, and every time we talk she tells me about something new she has come up with. I wouldn't be surprised if in a short time she looks to establish a similar business in another area and maybe even become a franchise. These are the things that happen when people fall in love with their projects and work with discipline and perseverance.

Thanks for your time.

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Todos tus comentarios son bienvenidos en este sitio. Los leeré con gusto y dedicación.
Hasta una próxima entrega. Gracias.



Las fotos, la edición digital y los Gifs son de mi autoría.

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