Buscando mi estrella, relato corto. (esp-eng)

Buscando mi estrella.

Fuente editada en canva.

Mis abuelos siempre decían que todos nacemos con una estrella especial dentro de nosotros y que a lo largo del camino recorrido esa estrella comienza a dar su brillo especial reflejando nuestro talento, aquel que nos hará diferentes del resto y hará que salgamos adelante, de pequeña antes de dormir siempre me relataban aquella historia y hasta soñaba que jugaba con mi estrella y en muchas otras ocasiones esa historia me hizo el centro del burlas de mis compañeros de clases.

Recuerdo que cuando tenía 13 años mi abuelo falleció y antes de morir su última frase a mi persona fue "busca tu estrella mi princesa", sostuve sus mano hasta que dio su último suspiro, con su partida ya no me quedaban abuelos y mi vida y núcleo familiar se redujo a mi madre, mi perro Meiker y yo, una pequeña familia y si se preguntan por mi padre solo diré que él vive en el cielo junto a mis cuatro abuelos.

Terminé la escuela sin siquiera un talento el cual explotar, me convertí en una solitaria que trabajaba en una cafetería y regresaba a casa a alimentar a Meiker y luego sacarlo a pasear, luego preparar la cena mientras llega mamá ese su trabajo y vivir con mi aburrida y rutinaria vida, cuando oscurecía me gustaba salir y sentarme en el columpio que me conoce desde que era bebé, ver el cielo y pregúntale a mis abuelos ¿donde esta mi estrella?, yo creo que al nacer se les olvidó ponerla o la mía aún no existe.

A lo lejos ya en mi habitación siempre escucho a mi vecina, una niña de 8 años que toca el piano de una forma que eriza la piel agradezco que no sea la batería pero quizás hasta ese instrumento sonaría bien en sus manos, mi mamá descubrió su estrella cuando era pequeña y sus postres alegran cualquier estado depresivo, esa una diosa de la repostería y ese don obviamente de no escapó ya que con suerte y preparó pasta con salsa de tomate, nada del otro mundo aunque mamá la alaba como si una chef profesional la hiciera.

¿Será quizás que debo salir en una expedición a buscar mi estrella?, 20 años y esta aun no aparece, no hay caso de hacerla brillar en mi, a veces se me ocurren cosas disparatadas como por ejemplo poner una bombilla eléctrica en mí pecho para hacer el brillo que no tengo, un día, una noche más, quizás esta noche en mis sueños el fulgor de mi estrella aparezca.

La rutina en ciertas ocasiones se apodera hasta de nuestra voluntad y terminamos moviéndonos como si algo o alguien o nos moviera desde algún lugar que no podemos ver, por cierto hoy es mi cumpleaños número 25, si así es ya pasaron cinco años como si hubiese sido un abrir y cerrar de ojos, hoy dejo llevar a Meiker al veterinario ya que es un perro algo viejo, a pesar de eso aun juega y me esconde los zapatos, se que lo hace para sacarme de los pensamientos y se lo agradezco.

Esa tarde en que planeaba ir al veterinario ocurrió algo un poquito extraño, una pareja con su hijo fueron a la cafetería y el niño no dejaba de verme, cuando les llevé la cuenta me dijo que era muy linda y me hizo sonreír, me despedí de ellos en la entrada y voltear vi que en la mesa que ocupaban habían quedado algunas cosas, me acerque a ver y eran algunos lienzos, pinturas y pinceles, salí corriendo pero ya no estaban y como se me hacía tarde tome esas cosas y las subí al auto, tenía prisa y debía ir por Meiker para su cita, cuando llegue a la casa mi perro estaba tendido en la alfombra con mi zapato en sus patas, ya no respiraba, llame a la veterinaria y llegó el doctor bastante rápido y como ya lo suponía mi fiel perro Meiker había dejado este mundo, lo tomé y sepulte en el patio junto al columpio, este columpio que fue espectador inerte de tantos juegos que tuvimos.

Me sentí triste ya que mi fiel perro había estado conmigo desde que tenía 3 años, subí a mi auto y conduje sin rumbo fijo y sin darme cuenta había llegado a la playa, me senté en la arena viendo el paisaje, una nube tomó la forma de mi Meiker, quizás quería despedirse, fui al auto y baje las cosas que la familia había olvida y sin darme cuenta en el lienzo blanco plasme a la perfección la imagen de mi perro, al fin había encontrado mi estrella, al fin brillaba en medio de la tristeza y desde ese día pintó todo lo que veo, termine especializando mi arte y plasmó retratos de familias que por algún motivo ya no están juntas y aunque sea en lienzo con los trazos de mi pincel los vuelvo a reunir en medio de bellas sonrisas.

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Looking for my star.

Fuente editada en canva.

My grandparents always said that we are all born with a special star inside us and that along the way that star begins to give its special shine reflecting our talent, the one that will make us different from the rest and will make us get ahead, as a child before going to sleep they always told me that story and I even dreamed that I played with my star and on many other occasions that story made me the center of ridicule from my classmates.

I remember when I was 13 years old my grandfather passed away and before he died his last sentence to me was "look for your star my princess", I held his hand until he gave his last breath, with his departure I had no grandparents left and my life and family nucleus was reduced to my mother, my dog Meiker and me, a small family and if you wonder about my father I will only say that he lives in heaven with my four grandparents.

I finished school without even a talent to exploit, I became a loner who worked in a cafeteria and returned home to feed Meiker and then take him for a walk, then prepare dinner while mom arrives from work and live with my boring and routine life, when it got dark I liked to go out and sit on the swing that has known me since I was a baby, see the sky and ask my grandparents where is my star, I think that at birth they forgot to put it or mine does not exist yet.

In the distance in my room I always listen to my neighbor, an 8 year old girl who plays the piano in a way that makes my skin crawl, I am thankful it is not the drums but maybe even that instrument would sound good in her hands, my mom discovered her star when she was little and her desserts cheer up any depressive state, she is a goddess of baking and that gift obviously did not escape since she was lucky and prepared pasta with tomato sauce, nothing out of this world although mom praises her as if a professional chef made it.

Maybe I should go on an expedition to look for my star, 20 years and it still does not appear, there is no way to make it shine in me, sometimes I think of crazy things like putting an electric bulb in my chest to make the brightness I do not have, one day, one more night, maybe tonight in my dreams the glow of my star appears.

The routine in certain occasions even takes over our will and we end up moving as if something or someone was moving us from some place we can't see, by the way today is my 25th birthday, yes that's right it's been five years as if it had been a blink of an eye, today I let Meiker go to the vet since he is an old dog, in spite of that he still plays and hides my shoes, I know he does it to get me out of my thoughts and I thank him for it.

That afternoon when I was planning to go to the vet something a little bit strange happened, a couple with their son went to the cafeteria and the boy kept looking at me, when I took them the bill he told me it was very nice and made me smile, I said goodbye to them at the entrance and when I turned around I saw that on the table they were at there were some things left, I went to see and they were some canvases, paints and brushes, I ran out but they were gone and as I was running late I took those things and put them in the car, I was in a hurry and I had to go for Meiker for his appointment, when I arrived at the house my dog was lying on the carpet with my shoe on his paws, he was not breathing anymore, I called the vet and the doctor arrived pretty fast and as I already supposed my faithful dog Meiker had left this world, I took him and buried him in the yard next to the swing, this swing that was an inert spectator of so many games we had.

I felt sad since my faithful dog had been with me since I was 3 years old, I got into my car and drove aimlessly and without realizing I had arrived at the beach, I sat on the sand watching the landscape, a cloud took the shape of my Meiker, maybe he wanted to say goodbye, I went to the car and took down the things that the family had forgotten and without realizing it, I perfectly captured the image of my dog on the white canvas, at last I had found my star, at last it shone in the midst of sadness and since that day painted everything I see, I ended up specializing my art and captured portraits of families that for some reason are no longer together and even if it is on canvas with the strokes of my brush I reunite them in the midst of beautiful smiles.

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Gracias por tomarte el tiempo de leer, nunca olvides que eres especial.

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