Gemas naturales de mujeres. Poema.

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Gemas naturales de mujeres.

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Dios con su naturaleza,
y sus brillos soberanos
proporcionó belleza
para los ojos humanos.

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Ojos negros.

Ojos negros como noches
redondas de brillo puro,
bello panorama oscuro
bordado por par de broches.
Azabache de derroches,
lindura sin sol ni luna
que en luces, una por una,
están en la feliz cara
con iluminación clara
a manera de fortuna.

Ojos amarillos.

Luceros de la mañana
tomados del mismo cielo
para dar lujoso vuelo
cual sublime resolana.
Aros de luz soberana
que iluminan todo el día,
y en paisaje de armonía
pintan las más bellas rosas
que, lindas y deliciosas,
se tornan en fantasía.

Ojos verdes.

Pulseras de lindo mar
de esplendor esmeraldino,
florido y bello camino
a vegetación sin par.
Ojos de hermoso brillar
-optimismo y esperanza-
donde la frescura afianza
su color más exitoso
para convertirlo en gozo
que en el alma se remansa.

Ojos marrones.

Redondeles de tallado
de la madera más fina,
que de fuente cristalina
bello color han copiado.
Ojos de marrón ansiado
con la vida de la tierra,
son frescura de la sierra
y adorno del horizonte,
donde el esplendor del monte
su bella apariencia encierra.

Ojos de miel.

De la más dulce colmena
extrajiste los colores,
la fragancia y los sabores
de la forma más amena.
Apariencia muy serena
de claror que se desata
y de iluminación grata
pulida en admiración,
ojos de mi corazón
con esa miel que me mata

Ojos azules.

Pinturas de atardecer
bajo brillo de decoro
de azul mar que cual tesoro
le da por resplandecer.
Llamas que empiezan a arder
en la bonita candela,
azul que a mí me desvela
por mirarlos tanto y tanto,
y tejen hermoso manto
de azulejos en su tela.

Ojos violeta.

Mezcla de azules y rojos
con tonos de inmensidad
conforman la unicidad
de estos exclusivos ojos.
En ellos tienen alojos
los morados y los lilas,
y en las pinturas tranquilas
plasman su lindo fulgor
de incomparable color
que existan en las pupilas.