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Lagrimas de un reloj que se detuvo en el tiempo

Las sombras del ayer siguen susurrando... Susurran en mi pecho, quizás no con la misma intensidad...

Mis ojos acaudalado, han sido vendados por esa herida que no cesan en el tiempo, buscan en la oscuridad el eco de tu voz, las últimas huellas de esas palabras que nos dijimos, que quedaron sujetas a un timón que ya no se cómo se navega y vuelve atrás...

Algunas noche lleva consigo tus pasos perdidos, y mi alma moribunda es despojada de luz, se ahoga en un océano de lamentos que no callan, mientras todo a mi alrededor se viste de sal y miedo.

El tiempo parece cruel y ajeno, sigue su curso sin más y menos, se burla de mi espera, de mi angustia, de este vacío en mi pecho, que no se de tiene a preguntar... Todo es como un río que no pide permiso, solo avanza a su paso,
y fluye sin detenerse con mis heridas.

¿Quién puede borrarme el sabor de esta pérdida?

No siento ni el gozo de mi ni de otros, ni el dulce consuelo de esas uvas amargas que se disuelven en el aire, haciendo que todo se detenga, y entonces todo parece nada y hace que nada parezca todo.

Entendí que nada apaga este dolor, nada lo calla, solo debo aprender a convivir con el en el tiempo...

La muerte se disfraza de silencio, pero en su sombra más vil, el mañana se cierne con un puñal que atraviesa mis entrañas, todo quema, todo arde, todo se razga y sangra en mi pecho, es una estaca que nunca se olvida, que siempre duele.

Mi luto, es una tradición muda y desgarrante,
se vuelve un manto sin medidas ni fin,
y el reloj, detenido en su eternidad,
sólo marca el paso del sufrimiento,
de las horas que no regresan, ni volverán.

Nada se detiene, ni la vida ni la muerte,
ambas se entrelazan en un vaivén imparable, siguen la voz del destino, como corrientes de aguas vivas y mansas, que surcan el cielo,
como un firmamento que sigue su curso,
sin importar la ausencia, sin reconocer el dolor de una madre en duelo... Tan sólo el reloj muestra esas lágrimas de dolor que el tiempo va consumiendo...

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Tears of a clock that stopped in time

The shadows of yesterday keep whispering... They whisper in my chest, maybe not with the same intensity...

My affluent eyes, have been blindfolded by that wound that do not cease in time, they search in the darkness for the echo of your voice, the last traces of those words that we said to each other, that remained attached to a rudder that I no longer know how to navigate and go back...

Some night carries with it your lost footsteps, and my dying soul is stripped of light, drowns in an ocean of laments that are not silent, while everything around me is dressed in salt and fear.

Time seems cruel and alien, it follows its course without more and less, it mocks at my waiting, at my anguish, at this emptiness in my chest, which I don't have to ask about? Everything is like a river that doesn't ask for permission, it only advances at its own pace,
and flows without stopping with my wounds.

Who can erase the taste of this loss?

I feel neither the joy of myself nor of others, nor the sweet consolation of those sour grapes that dissolve in the air, making everything stop, and then everything seems like nothing and makes nothing seem like everything.

I understood that nothing quenches this pain, nothing silences it, I only have to learn to live with it in time...

Death disguises itself as silence, but in its vilest shadow, tomorrow looms with a dagger that pierces my entrails, everything burns, everything burns, everything tears and bleeds in my chest, it is a stake that is never forgotten, that always hurts.

My mourning, is a mute and tearing tradition,
becomes a mantle without measures or end,
and the clock, stopped in its eternity,
only marks the passage of suffering,
of the hours that do not return, nor will return.

Nothing stops, neither life nor death,
both intertwine in an unstoppable swaying, they follow the voice of destiny, like currents of living and gentle waters, which flow through the sky,
like a firmament that follows its course,
regardless of the absence, without recognizing the pain of a mother in mourning... Only the clock shows those tears of pain that time consumes...