La Thundra, la cola y la gasolina [ESP-ENG]

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En la historia de la humanidad abundan las trilogías, van desde la sagrada trilogía católica del Padre, el hijo y el espíritu santo, pasando por trilogías famosas del cine como el Bueno, El malo y El feo, un famoso éxito taquillero de la década de los 60 del siglo pasado. En la filosofía también existen trilogías, una de ellas es la trilogía de la Matemática, El arte y la naturaleza considerada como la más sagrada de todas. Esta conjunción de tres elementos evidencia una sólida inter relación entre los elementos que la conforman. Ahora bien, como aprendiz de filósofo, sentado hace un par de días en mi larga y tediosa cola para surtir combustible, me llamo la atención de la numerosa presencia de estos tres elementos: La Thundra, la cola y la gasolina. Me puse a preguntarme que hacía tan disonante la conjunción de estos tres elementos.

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La primera vez que escuche la palabra thundra fue cuando curse la asignatura de Botánica general por allá en los años 1600. La descripción de este desconocido ecosistema me quedo para siempre grabado en mi mente. Recuerdo que cuando vi las fotos del libro, recuerden que no había google, me sorprendió al ver que era una especie de sabana criolla pero en la zona norte del planeta. La Thundra está ubicada en una gran zona que abarca desde Canadá, Groenlandia, todo el norte de Europa del Este también se le puede encontrar en la parte más extrema de Suramérica. Esta extensa sabana de clima con bajas temperatura y que permanece congelada gran parte del año es sinónimo de dureza, de fortaleza, se dice que los que sobreviven allí son los más resistentes del planeta. Es un ecosistema tan duro que al propio Gen gis Kan le costó dominar. Quizás gigante de la industria automotriz japonesa se haya inspirado en esta dureza, en esta resistencia a las condiciones extremas cuando le puso este nombre a una camioneta. No creo que jamás se le hubiese ocurrido que esas camionetas fueran ahora el símbolo de riqueza, de enchufe y de poder, como ocurre en nuestro bloqueado país. Su elevado costo en dólares, así como el uso diario en vez de recorrer la estepa congeladas o las carreteras extremas de un solitario campo petrolero, son usadas para ir a los chinos o para estacionarse en algún afamado centro comercial.

Como ovejas que seguimos al perro pastor, cada día nos toca hacer largas e interminables colas. Ya no recuerdo cuando comenzamos hacer cola en Venezuela para poder adquirir productos de la vida cotidiana. Ahora más bien nos resulta agradable cuando encontramos una cola corta, pequeña y solo perdemos un par de horas de nuestro valioso tiempo. El surtir gasolina dolarizada o no es ahora una situación extrema. Hay que preparase, agua, café, libros, y hasta ron son enseres imprescindibles. Ni hablar de las penurias que se pasan cuando sobreviene las ganas de hacer alguna de las necesidades fisiológicas. La paciencia y el humor parecen ir disipándose poco a poco los paisanos que están en las colas ya muestran síntomas de irritabilidad, desesperanza y hasta violencia.

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Sobre la gasolina, que puedo decirles que ustedes no sepan. Hasta los niños saben que a pesar de tener enormes campos petroleros no tenemos gasolina. Lo único que les importa ahora a los colistas es cuando llegara la gandola, cuantos litros descargan, cuantos carros nos irán a colear.

Ahora bien, se preguntarán por la trilogía del título, Una cola de gasolina subsidiada en principios internacionales de políticas económicas debe ser dirigida para favorecer a los sectores más vulnerables, es decir, a los pobres a los que no nos alcanza los cobres para vivir. Parafraseando a la canción de Ricardo Arjona ¿Qué es lo que hace una thundra en una cola de gasolina subsidiada? Si yo sé que me dirán que todos tienen derecho a disfrutar las riquezas de nuestro país. ¿Pero ya tuviste ese derecho y compraste una poderosa camioneta de más de 200 mil dólares y no tienes para echar 30 $ dolores de gasolina? No es solamente este tipo de modelo o marca de vehículo, sino que es una gran variedad de vehículos de alta gama, eso que burlan el bloqueo gringo y logran llegar triunfante a las costas venezolanas trayendo el despiadado lujo gringo.

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Es asombroso ver que en las estaciones dolarizadas la mayoría de los carros son modelos sencillos, viejos, y de trabajo. Es decir, el pobre, el trabajador, el que requiere de su vehículo para producir, hace el sacrificio por pagar una gasolina cara, mientras que el neo rico hace todo lo posible por colearse en las estaciones subsidiadas. Este análisis no es solo mío, compartiendo saberes con un gran hermano que reside en otra nación, Luis Figuera me decía con relación a este tema: “Desde cuando están tan enfermos nuestros países de Latinoamérica? La situación económica, social y medioambiental va empeorando. Escasez, injusticias, desigualdades, pésimos servicios públicos y cada vez menos acceso a educación de calidad.” Esta especie de tendencia, de que solo me importa lo mío, de que como tengo poder puedo hacer lo que venga en gana.

Urge que todos comprendamos que es el momento de comenzar a construir una nueva trilogía, una que sea de Amor, progreso y libertad.

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In the history of mankind, trilogies abound, ranging from the sacred Catholic trilogy of the Father, the Son and the Holy Spirit, to famous movie trilogies such as The Good, The Bad and The Ugly, a famous blockbuster of the 60's. In philosophy there are also trilogies, one of them is the trilogy of Mathematics, Art and Nature, considered the most sacred of them all. In philosophy there are also trilogies, one of them is the trilogy of Mathematics, Art and Nature, considered the most sacred of all. This conjunction of three elements evidences a solid interrelation between the elements that conform it. Now, as an apprentice philosopher, sitting a couple of days ago in my long and tedious queue for fuel, I was struck by the numerous presence of these three elements: Thundra, cola and gasoline. I began to wonder what made the conjunction of these three elements so dissonant.

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The first time I heard the word thundra was when I took general botany back in the 1600s. The description of this unknown ecosystem remained forever engraved in my mind. I remember that when I saw the photos in the book, remember that there was no google, I was surprised to see that it was a kind of Creole savannah but in the northern part of the planet. The Thundra is located in a large area that spans from Canada, Greenland, all of northern Eastern Europe and can also be found in the most extreme part of South America. This extensive savannah climate with low temperatures and that remains frozen much of the year is synonymous with hardness, strength, it is said that those who survive there are the most resilient on the planet. It is an ecosystem so tough that Gen gis Kan himself found it difficult to master. Perhaps the giant of the Japanese automotive industry was inspired by this toughness, this resistance to extreme conditions, when he gave this name to a pickup truck. I don't think it would have ever occurred to him that these vans would now be the symbol of wealth, power and power, as it happens in our blockaded country. Their high cost in dollars, as well as their daily use instead of touring the frozen steppe or the extreme roads of a lonely oil field, they are used to go to the Chinese or to park in some famous shopping mall.

Like sheep following the shepherd dog, every day we have to stand in long and endless lines. I no longer remember when we started standing in line in Venezuela to buy everyday products. Now it is rather pleasant when we find a short, small line and we only lose a couple of hours of our valuable time. Getting gasoline, dollarized or not, is now an extreme situation. Water, coffee, books, books, and even rum are essential items. Not to mention the hardships we go through when we feel the urge to do some of our physiological needs. Patience and humor seem to be dissipating little by little, the people in the lines are already showing symptoms of irritability, hopelessness and even violence.

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About gasoline, what can I tell you that you do not already know. Even the children know that in spite of having huge oil fields we have no gasoline. The only thing that matters now to the tailenders is when the truck will arrive, how many liters will be unloaded, how many cars will come to pick us up.

Now, you may be wondering about the trilogy of the title, A subsidized gasoline queue in international principles of economic policies should be directed to favor the most vulnerable sectors, that is to say, the poor who do not have enough money to live on. To paraphrase Ricardo Arjona's song, what does a thundra do in a subsidized gasoline queue? I know you will tell me that everyone has the right to enjoy the riches of our country, but you already had that right and you bought a powerful truck of more than 200 thousand dollars and you don't have enough money for 30 $ gas pains? It is not only this type of model or brand of vehicle, but a great variety of high end vehicles, those that circumvent the gringo blockade and manage to arrive triumphantly to Venezuelan shores bringing the merciless gringo luxury.

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It is amazing to see that in the dollarized stations most of the cars are simple, old, and working models. That is to say, the poor, the worker, the one who needs his vehicle to produce, makes the sacrifice to pay for expensive gasoline, while the neo-rich do everything possible to get on the subsidized stations. This analysis is not only mine, sharing knowledge with a great brother who resides in another nation, Luis Figuera told me in relation to this issue: "Since when are our Latin American countries so sick? The economic, social and environmental situation is getting worse. Scarcity, injustices, inequalities, lousy public services and less and less access to quality education." This kind of tendency, that I only care about what is mine, that since I have power I can do whatever I want.

It is urgent that we all understand that it is time to start building a new trilogy, one of Love, progress and freedom.