Fuente

Enero 2

Cuenta la leyenda que en un lugar en el norte, que ya casi no recuerdo, se condensaban las almas de aquellos grandes capitanes que en otrora, fueron el miedo y el terror de los 7 mares, cuyo legado era tan grande, que hacía sollozar a los pequeños mercantes, mucho más que cualquier monstruo marino.

Se equipara al triangulo de las Bermudas, porque quienes se atrevieron a cruzar sus barcas al tormentoso lugar, sintieron una pesadez enorme, y lograron huir despavoridos porque según sus respuestas "Poseidón andaba de buenas, y los dejó salir para que no tuvieran que conocer a Hades". Aquella misteriosa manifestación de miedo convertida en mar, enloquecía a cualquiera que se atreviera a cruzar la línea imaginaria.

Desde Edward Teach, (Barbanegra para los amigos), pasando por Anne Bonny, John Roberts, Black Sam, e inexplicablemente Ching Shih, en este pequeño espacio del altamar te encontrarás a estos infames piratas, con sus enormes navíos intentando acechar tus barcos, o indicándote la salida si es que eres de corazón noble, pero advirtiéndote que jamás vuelvas pisando ese lugar, o lo lamentarás.

Pero seamos sinceros, nadie que cruce la "Rotonda de agua" va con buenas intenciones, por aquello del invaluable tesoro que se esconde en sus profundidades, pero de nada sirve un tesoro, si trae consigo una maldición sin reparo.

La rotonda no mata el cuerpo, pero consume el alma. Todos los navíos que llegaron desde aquel lugar del norte, llegaron incompletos; con toda su tripulación sí, pero aquellos hombres ya no eran marineros, sino cascarones vacíos llenos de miedo.

La locura invade a quienes regresan, y están condenados a una miserable vida, sin embargo, el espíritu aventurero, es el que nos guía a explorar esas aguas, porque el tesoro más grande, es el misterio que envuelve al lugar. Me advierten que no vaya, pero mi tripulación y yo, estamos listos para partir.

Marzo 15

Antes de partir hacia la Rotonda, nos quedamos dos días en La Isla de los Lamentos, así que después de comer y beber, iremos a bordo del "Paraulata". No perseguimos el oro, sino algo más allá que podremos conseguir, claro que hablo del conocimiento. Calculo que en 2 meses estaremos allá.

Mayo 18

Ya casi entramos a la Rotonda, y desde aquí se oyen voces advirtiendo que no entremos, no tenemos miedo porque no queremos Oro, pero nuestra cordura empieza a fallar cada que nos acercamos al misterioso círculo, es por ello, que este diario, lo envío de vuelta a casa, donde podrán leer mi historia, y si llego vivo, sabrán que lo logré.

Diario de Jack LaPorta, capitán del "Paraulata".

Aquí mi aporte para el concurso de Literatos en honor Ernest Hemingway, espero lo disfruten.