Oxigenando mi vida con pasos

Se me hace difícil levantarme temprano, siempre ha sido así y es algo inevitable, porque es parte de mi rutina. Pero tengo una motivación, caminar luego de llevar a los niños a sus colegios.

Amo ese espacio de mi día, en el que puedo sentir la brisa en mi cara, mientras siento que hago lo correcto. Siento que caminar oxigena mi vida.

La mañana me regala un abrazo frío, mientras poco a poco, mis pasos van surtiéndome el calor que necesito para sentirme cómoda.

Disfruto el cielo, aunque esté gris, él es hermoso de cualquier manera. Si está soleado o nublado, me acompaña de cualquier manera. Amo el sol, también la lluvia, así como consigo estar bien con mis lágrimas de tristeza y de alegría.

Disfruto la naturaleza, mientras recorro el lugar que nos recibe cada mañana, un campo deportivo, no muy bien cuidado, pero que tiene lo suficiente para andarlo.

De repente observo un par de aves, parecen unas garzas grises, no las había visto antes por aquí. Me acerqué sólo un poco para tomarles una fotografía, pero no les agradó la idea, retrocedieron y se dispusieron a marcharse.

Varias mangueras con hoyuelos, como la que se puede visualizar en la foto anterior, atraviesan la parte central de la pista; un trabajador las coloca a diario para regar su verde y cuidada grama, me alegró ver que la menos esa zona sí tiene mantenimiento y pensé que gracias a eso era posible caminar allí.

También se encuentran en el camino, unas florecitas silvestres que no molestan, más bien lucen bien, hay algunas moradas y otras amarillas.

Mientras andaba, conversaba amenamente con mi amor y la aplicación "Addidas Running" se encargaba de llevar el registro de nuestros pasos, anunciando cada kilómetro alcanzado.

Intentamos llevar un buen ritmo, nuestra meta en tiempo son 45 minutos y lo logramos, alcanzando una distancia de casi de 3,5 kilómetros. Poco a poco vamos avanzando.

¡Misión cumplida! Agradezco a Dios por la oportunidad de cada momento, por respirar por poder caminar, usar mis 5 sentidos, porque respiro bien, duermo bien, puedo alimentarme, vestirme y tengo un techo donde dormir. Además, soy amada. Me siento afortunada.

La vida desde el agradecimiento, es una vida llena de bendiciones.

Gracias a todos ustedes por tanto...

Las fotografías mostradas son de mi propiedad.
Separador elaborado en PowerPoint.