El Pan de la Guerra es una película animada de drama, estrenada en el año 2017 por el estudio de animación Cartoon Saloon. Fue dirigida por Nora Twomey; la misma que ya había dirigido con antelación otra película animada llamada: The Secret of Kells. Está protagonizada por Saara Chaudry como Parvana, Soma Bhatia como Shauzia / Deliwar, Ali Badshah como Nurullah, entre otros. La producción ejecutiva estuvo compuesta por Mimi Polk Gitlin y Angelina Jolie (como he mencionado en mi introducción) basándose en la novela para niños del mismo nombre de Deborah Ellis. Fue distribuida por Elevation Pictures y StudioCanal, en una colaboración cinematográfica entre los países Canadá, Irlanda y Luxenburgo.

La película fue estrenada a nivel mundial en septiembre del 2017 en el Festival de cine de Toronto, en Canadá y fue nominada a Los 90° Premios de la Academia como Mejor película Animada. Actualmente, se puede encontrar dentro del servicio de streaming para películas y series Netflix.

La película está ambientada en la capital de Afganistán: Kabul, en el año 2001, bajo el dominio talibán en este país durante el periodo 1996-2001. Nuestra protagonista se llama Parvana (Saara Chaudry), una niña de once años que vive en condiciones de pobreza con su padre, su madre, su hermana mayor y su hermano menor. Parvana, acompaña a su padre todos los días al mercado para ayudarlo a ganar algo de dinero, anteriormente era maestro, pero perdió una de sus piernas durante la guerra contra los rusos.

Un día, el padre de Parvana es enviado a prisión, debido a una confrontación que tuvo con uno de sus antiguos alumnos que ahora es parte de los talibanes. En condiciones precarias, sola con su madre y hermana mayor y su hermanito, ya que las mujeres no pueden salir solas de sus casas sin la compañía de un hombre, Parvana decide cortarse el cabello y disfrazarse de chico para salir a buscar trabajo y mantener a su familia hasta que regrese su padre de prisión.

Desde un principio, la película nos va preparando el terreno de algo extraordinario que va a suceder. Tal y como en The Secret of Kells, la directora sabe como activar nuestra imaginación, aunque para algunos, es una táctica ya usada en la película antes mencionada, sin embargo le ha servido muy bien hasta ahora. El pan de la guerra, nos habla de una sociedad en extrema pobreza, bordeada por hermosos paisajes en acuarelas donde vemos colores cálidos sobre edificios derruidos. Cada detalle en esta película fue realizado de acuerdo al entorno que trata, para esto, la producción fue asesorada por nativos afganos, y así darle coherencia y credibilidad al ambiente de la historia.

La película toca aspectos complejos y es una crítica en contra del machismo, la religión islámica radical que atenta contra los derechos humanos y promueve maltrato físico hacia la mujer. También nos habla sobre la imaginación, de como esta puede servir como escape ante un mundo que nos coacciona a desfallecer. Una historia dentro de la historia se va desarrollando, y esta es una de las cosas más interesante, porque esta otra historia se convierte en una referencia ficticia de todo lo que Parvana vive.

Aunque la historia está envuelta en un trasfondo muy oscuro y lleno de riesgos, hay partes en que Parvana disfruta de su vida como un chico. Ella se siente libre, porque puede ir a donde sea; cosa que no puede hacer siendo una chica. Puede trabajar, ganar su propio dinero junto con su amiga Shauzia (Soma Bhatia), quien también es una chica disfrazada de chico, y que también fue compañera de clases de Parvana, antes de que los talibanes prohibieran la educación escolar a las mujeres.

Hay momentos impactantes en que veremos las atrocidades que cometen los talibanes a las personas de más bajos recursos, especialmente a las mujeres, que son castigadas severamente y al aire libre. Encontraremos también escenas sobre la invasión de Estados Unidos a Afganistán en el año 2001, arrebatándole a los talibanes el país, después de haber tenido el poder desde 1996 luego de la caída de Kabul. En este sentido, podemos ver algunas escenas de bombas cayendo del cielo; de una invasión inminente de parte del gigante norteamericano.

Este filme, como todos los que tocan este tipo de temas fuertes, está lleno de sentimentalismo y es un ejemplo de veracidad histórica, más allá de una pequeña afgana que vive las penurias y directrices severas de un régimen talibán. Es lamentable ver esta película y darse cuenta que estas cosas ocurren nuevamente. Las mujeres que iban a la universidad, ahora tienen tapar sus rostros y el resto de su cuerpo con el velo llamado “Burka”. Con este régimen que ha tomado este país nuevamente, hoy en día, se han destruido muchos avances que se habían logrado durante estos últimos 20 años.

Si quieres conocer como es la vida dentro de la sociedad afgana, dominada por el régimen talibán, te recomiendo ver esta película llena de drama, un poco de humor y gallardía.