El reflejo de un pasado oscuro [ES/EN]

Guillermo jamás comprendió como fue que un supuesto hermano llegó a su vida luego de tanto tiempo. Habían pasado al menos 28 años desde que su madre había perdido un embarazo por la violencia ejercida por su padrastro, quien estuvo tras las rejas hasta que no se supo más de él.

Una persona se presentó con el nombre de Ismael en la puerta de su casa. Vestía ropa elegante y un peinado anticuado recubierto en gel. Traía consigo una botella de vino para festejar lo que para él sería un emotivo reencuentro. Nada más lejos de la realidad, pues para su sorpresa, Guillermo se mostró incómodo y dudoso sobre la situación que le acontecía. Aún así, le siguió la corriente.

— Bueno, pasa. ¿O te quedarás ahí tomando frío? Mencionó Guillermo

Ya dentro de la casa comenzaron a charlar sobre distintas cosas mientras sostenían una copa de vino en sus manos, la cual movían en círculos dando apenas pequeños sorbos. Estaba claro que los temas de conversación se estaban acabando y era más que inevitable hablar sobre lo inusual de ese reencuentro. Los motivos por los que estaba allí. ¿Qué buscaba en realidad?

De pronto el ambiente se puso algo tenso cuando comenzaron a hablar del pasado. Ismael mencionó que en realidad su padre no se distanció por un divorcio, ni los dejó a la deriva, sino que había muerto por causas extrañas en donde nunca hubo un culpable.

Un hombre adinerado que se había volcado hacia el alcohol y los malos vicios. Quizás fueron malas elecciones pero no por ello bien merecidas.

En ese momento de desconcierto fue que ambos sacaron una conclusión apresurada y pensaron que aquél padrastro tras las rejas fue quien ideó la atrocidad de quitarse del medio a un hombre que tenía una mala relación matrimonial y aprovechar de las circunstancias para vaya a saber cuál fin.

Mucho se había dicho sobre una muerte en un callejón oscuro y lluvioso, donde solo el alma de un gato nocturno pudo haber sido testigo de ese momento mortal. Los diarios jamás profundizaron sobre aquel hecho, por lo que todo quedó tapado y en el absoluto olvido para todos. Algo muy conveniente.

Un hombre que poseyó riquezas tanto en dinero como en propiedades. Quizás no solo existió un motivo pasional sino más bien había algo más y que no se había acabado. Aún seguía vigente.

Cuando Guillermo menos se lo esperó fue que sintió el calor de su sangre recorriendo su cuerpo. Un disparo en el cuello penetró con suma ferocidad su piel, rasgándola de mala manera, significando una herida de gran gravedad.

Atinó a cubrirse con la mano pero seguía sangrando y llegó un momento en el que caía en un profundo letargo que le producía somnolencia mientras su cuerpo, pálido, frío y transpirado, comenzaba a dar signos de que su muerte estaba aún más cerca.

Irremediablemente y sin más que hacer los vecinos que escucharon el disparo llamaron a la policía sin poder dar con el perpetrador.

La ambulancia se tardó lo suficiente como para llegar demasiado tarde a la escena, cuando Guillermo aún estaba luchando por su vida, buscando respirar una vez más.

Lo último que vislumbró fue la silueta de un supuesto hermano escapando por aquella puerta por la que se lo recibió. Aunque desde un primer momento ese hombre tenia una clara intención. Quedarse con el patrimonio de alguien más quitando del medio a cualquier posible competidor.