La firma que no era mía [ES/EN]

engin akyurt | Unsplash

Muchas de las pesadillas que sufría de pequeño empeoraron mientras crecía. Mis padres se exaltaban cada vez que estos tormentos tocaban la puerta de mis sueños. Por un momento pensaron que estaba desarrollando algún desequilibrio mental. Lo cierto es que uno de mis temores era que me apartasen de ellos; sobre todo por quien me debería examinar.
No era un secreto que ese médico era sádico en apariencia. Parecía retorcerse de placer al analizar el cerebro de los animales, o al menos ese era uno de los rumores entre otros que resultaban mucho más enfermizos. De hecho, muchos de sus colegas se habían maravillado con su intelecto, pero decidieron dar un paso al costado al conocer sus múltiples facetas y no hallar rastros de sus intenciones.
Se decía, además, que sus prácticas eran interrumpidas por ecos de una deidad oscura que no podría hallarse sino en los malos presagios. Entonces mi temor no era solo por mí, sino por mis progenitores, quienes aseguraban que hacían todo por mi integridad emocional. No es que lo justifique, pero al pasar los años comprendí que algo extraño había en mi interior; comencé a darle importancia a las visitas de ultratumba, de observar con detenimiento las sombras que se creaban a través de la palidez de una luna infinita, pero sobre todo, de excitar las fibras más sensibles de mis sentidos, como el olor a musgo impregnado en las paredes de una piedra antigua, heredada por familias que ya no están.
En estas circunstancias la llegada de mi juventud solo trajo consigo desesperanza para mis padres, que parecían envejecer tristemente, como si la erosión del tiempo se sumase al infortunio que yo les provocaba diariamente. Definitivamente no estaba en mis planes el convertirme en abogado de barba espesa, o tal vez en un señor contable. Mi mente ahora abarcaba el análisis de criaturas que aún no entendemos lo suficiente, pero también daría lugar a las que no pertenecerían a este mundo, cuya existencia era visible en las profundas garras de lo desconocido.
Ahora las pesadillas se acompañaban de ilusiones ópticas que se encontraban en formas a las que no les prestaba atención. Vislumbraba todo tipo de siluetas a las que le atribuía algún aspecto paranormal, por no decir algo más perturbador. Eso era algo que el médico había mencionado que desarrollaría si no se me trataba a tiempo, aunque en cierto modo parecía hacer lo posible por que mis padres ignoren el caso atribuyéndolo a una rebeldía anticipada.
Una vez decidí visitar al médico sorpresivamente. Quería saber en qué trabajaba a las altas horas de la noche, mientras solo podía escucharse la brisa de los árboles compitiendo con la espesura de una niebla abundante. Esa noche ingresé por donde solo un inconsciente de fina talla pudiera descender. Los hierros retorcidos que bloqueaban la entrada me ofrecían una visión sobre quién estuvo allí las anteriores noches; como si una clarividencia que se manifestaba en un subidón de adrenalina que no podía contener sin un grito de por medio, se presentase en el momento menos oportuno.
Una nota yacía por encima de un libro de anatomía, casi invisible tras la caída de hojas de periodo otoñal. Veo un resplandor enalteciendo posturas inquietantes. Soy prisionero del temor por el cual estoy en una posición de saber la verdad; aquella que dirá si mi hijo se ha convertido en todo lo que temí, o se habrá ido sin esa mancha de oscuridad. Los dedos ya no me obedecen al desdoblar el papel: —Padre, si lees esto posiblemente sea muy tarde. No busques en qué me convertí, solo recuerda quien fui.—
—La nota contenía la firma de quién alguna vez se presentó esbozando una sonrisa de gran gentileza; llena de una humedad viscosa y el trazo de una pluma brillante. Había sangre fresca en una de sus puntas.

Many of the nightmares I suffered as a child worsened as I grew older. My parents became upset every time these torments knocked on the door of my dreams. For a moment, they thought I was developing some kind of mental imbalance. The truth is that one of my fears was that they would take me away from them, especially because of who would examine me.
It was no secret that this doctor was sadistic in appearance. He seemed to writhe with pleasure when analyzing the brains of animals, or at least that was one of the rumors among others that were much more sickening. In fact, many of his colleagues had marveled at his intellect, but decided to step aside when they learned of his many facets and found no trace of his intentions.
It was also said that his practices were interrupted by echoes of a dark deity that could only be found in bad omens. So my fear was not only for myself, but also for my parents, who claimed they were doing everything for my emotional well-being. Not that I justify it, but as the years went by, I realized that there was something strange inside me; I began to attach importance to visits from beyond the grave, to carefully observe the shadows created by the pallor of an infinite moon, but above all, to excite the most sensitive fibers of my senses, such as the smell of moss impregnated in the walls of an ancient stone, inherited by families that are no longer there.
In these circumstances, my arrival as a young man brought only despair to my parents, who seemed to age sadly, as if the erosion of time added to the misfortune I caused them daily. It was definitely not in my plans to become a lawyer with a thick beard, or perhaps an accountant. My mind now encompassed the analysis of creatures we still do not understand well enough, but it would also give rise to those that did not belong to this world, whose existence was visible in the deep claws of the unknown.
Now the nightmares were accompanied by optical illusions that took the form of things I did not pay attention to. I glimpsed all kinds of silhouettes that I attributed to some paranormal aspect, not to mention something more disturbing. That was something the doctor had mentioned would develop if I wasn't treated in time, although in a way he seemed to be doing his best to make my parents ignore the case by attributing it to early rebellion.
Once I decided to visit the doctor unexpectedly. I wanted to know what he was working on late at night, when all you could hear was the breeze rustling through the trees, competing with the thick fog. That night I entered through a place where only someone unconscious of their surroundings could descend. The twisted iron bars blocking the entrance gave me a glimpse of who had been there the previous nights, as if a clairvoyance manifested in an adrenaline rush that I couldn't contain without a scream had appeared at the least opportune moment.
A note lay on top of an anatomy book, almost invisible behind the fallen autumn leaves. I see a glow enhancing disturbing postures. I am a prisoner of fear because I am in a position to know the truth; the truth that will reveal whether my son has become everything I feared, or whether he will have left without that stain of darkness. My fingers no longer obey me as I unfold the paper: “Father, if you are reading this, it may be too late. Do not look for what I have become, just remember who I was.”
The note bore the signature of someone who once introduced himself with a smile of great kindness, full of viscous moisture and the stroke of a shiny pen. There was fresh blood on one of its tips.

engin akyurt | Unsplash

- Imagen principal editada en Canva.
- Traducción al inglés con DeepL.
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¡Hola! @vikvitnik
Interesante, pero corre, huye, no te dejes atrapar, no sea que Constantin no te pueda salvar, que caigas en las garras de aquel bicho de Kafka o Pávlov te ponga un collar.
Felicitaciones.
Sí, ¡sin dudas podría ponerse mucho peor!
¡Gracias por leerme @felixmarranz , lo agradezco mucho 🤗!
Espero por el siguiente episodio.
Gracias por el obsequio. Un abrazo fuerte y éxito.
Wow. Una excelente historia, con una gran narrativa, oscurantismo y un suspenso que al final nos deja pensando en lo que le sucederá al protagonista en ese lugar terrorífico. Excelente trabajo.
Gracias por compartir tu historia con nosotros.
Excelente martes.
¡Muchas gracias por la lectura! Probablemente de ahora en más me enfoque en este estilo de narrativa, a ver si la domino 😋. Espero estés bien, un saludo.