El reloj | The watch

avatar

Bienvenidos

Deuteronomio 6: 1-9

1 Estos, pues, son los mandamientos, estatutos y decretos que Jehová vuestro Dios mandó que os enseñase, para que los pongáis por obra en la tierra a la cual pasáis vosotros para tomarla;
2 para que temas a Jehová tu Dios, guardando todos sus estatutos y sus mandamientos que yo te mando, tú, tu hijo, y el hijo de tu hijo, todos los días de tu vida, para que tus días sean prolongados.
3 Oye, pues, oh Israel, y cuida de ponerlos por obra, para que te vaya bien en la tierra que fluye leche y miel, y os multipliquéis, como te ha dicho Jehová el Dios de tus padres.
4 Oye, Israel: Jehová nuestro Dios, Jehová uno es.
5 Y amarás a Jehová tu Dios de todo tu corazón, y de toda tu alma, y con todas tus fuerzas.
6 Y estas palabras que yo te mando hoy, estarán sobre tu corazón;
7 y las repetirás a tus hijos, y hablarás de ellas estando en tu casa, y andando por el camino, y al acostarte, y cuando te levantes.
8 Y las atarás como una señal en tu mano, y estarán como frontales entre tus ojos;
9 y las escribirás en los postes de tu casa, y en tus puertas.
RVR 1960

image.png

Pixabay



En nuestros tiempos, el reloj constituye casi un articulo de primera necesidad. Por eso lo tenemos en agendas, paredes, nuestras muñecas, computadoras o celulares. Cada vez somos mas prisioneros del tiempo y corremos a "contra-reloj" muchas veces. Es un medidor tirano para algunos, porque no se detiene, pero también nos llama la atención acerca de nuestras obligaciones.

El eterno, recuerda que somos temporales. Por eso les comunica a los israelitas que deben cuidar que la palabra de Dios no se les olvide. Sabe de lo frágil que es nuestra memoria y la capacidad que tenemos para distraernos. Como era transmitida en forma oral, esta debía repetirse exactamente, todos los días en todo lugar. Por eso Dios nos manda que grabemos su palabra en nuestros corazones, que la hablemos en nuestro hogar y en la congregación. Como un reloj que esta allí para ser consultado cuando se necesita, así la palabra viva, debe estar en nuestra mente y alma para ser aplicada en diario vivir. Dios instruyó a Josué acerca de que nunca se apartar de su boca su palabra, pero no solo para conocerla, sino para que meditándola, nuestro proceder sea absolutamente coincidente con ella (Josué 1:8). La promesa para Josué es la misma que para nosotros hoy. Si obramos como Dios nos dice, las cosas saldrán bien. No dejemos cada día de apartar tiempo para instruirnos en las sagradas escrituras, examinarnos a la luz de ellas, repetirlas, memorizarlas y también hablarlas con quienes nos rodean.

... todo el día es ella mi meditación" Salmo 119:97

Inspirado en la lectura de alimento para el alma

Gracias por tu visita!




English

Reading in Deuteronomy 6: 1-9

In our times, the watch is almost an article of first necessity. That is why we have it on diaries, walls, our wrists, computers or cell phones. Every time we are more prisoners of time and we run "against the clock" many times. It is a tyrant meter for some, because it does not stop, but it also draws our attention to our obligations.

The eternal remember that we are temporary. This is why he communicates to the Israelites that they must take care that the word of God is not forgotten. You know how fragile our memory is and our ability to distract ourselves. Since it was transmitted orally, it had to be repeated exactly, every day, everywhere. So God commands us to engrave his word on our hearts, to speak it in our home and in the congregation. Like a clock that is there to be consulted when needed, so the living word must be in our mind and soul to be applied in daily living. God instructed Joshua that his word should never depart from his mouth, but not only to know it, but so that, meditating on it, our behavior is absolutely consistent with it (Joshua 1: 8). The promise to Joshua is the same as it is to us today. If we act as God tells us, things will turn out well. Let us not allow every day to set aside time to instruct ourselves in the sacred scriptures, examine ourselves in light of them, repeat them, memorize them and also speak them to those around us.

"... all day long she is my meditation" Psalm 119: 97

Inspired by reading food for the soul

Thanks for your visit!



0
0
0.000
1 comments