Por: @flores39
30/05/2020

Hola Comunidad:

Converso ocasionalmente con algún familiar o amigo y les escucho decir con frecuencia: ¿Cuándo terminará esta cuarentena? ¡Dios mío! y antes del minuto me preguntan ¿Sigues en la línea? Y con tranquilidad les contesto que sí, estoy en línea atenta a lo que me está diciendo. Luego entra el reproche de por qué guardo silencio cuando pronuncian el término de la cuarentena. Y mi respuesta es que no puedo responder algo que debe responderse esa misma persona.

Desde el punto de vista político y sanitario hay que permanecer en casa hasta que el virus COVID-19 sea controlado. Así que a relajarse y peinarse en casa desde la sala a la cocina y desde la habitación al estudio y luego al baño para repetir el ciclo. Libres, pero cerrados. La estrategia de mantener a la sociedad confinada hasta que los científicos encuentren la manera de aislar o eliminar el virus, me parece descabellada; siempre la he percibido así porque no sé que escuela de medicina diseñó tal protocolo sanitario. Dentro de mis reflexiones me pregunto ¿Será que los mismos que crearon el virus son los que están buscando la solución a la situación?

Una vez vi una película que trataba sobre un bombero que tenía la intuición del lugar donde ocurriría el incendio, por tanto era el primero en llegar al lugar y empezar apagar el fuego. Este ejemplar servidor no era vidente ni algo por el estilo, sencillamente preparaba el lugar y accionaba la chispa en el momento indicado. Desde la Grecia clásica, imperio romano y durante el medioevo hasta la actualidad, se han documentado muchas situaciones como la de ese bombero pirómano con estandarte de héroe.

Así que con esta espectacular vista al mar Egeo, de donde zarpó el vencedor del aterrador Minotauro, me pregunto ¿Será posible que la nefasta inteligencia de estos seres sea más grande que la luminosa inteligencia del resto de la humanidad que cree en un mundo en el que la maldad está en cuarentena en el núcleo de la Tierra y en el ardiente Sol? 🤣

Aprecio tu atención

✅La fue tomada en Santorini (Grecia) hace 2 años con un dispositivo móvil iPhone 6 plus.