El caminante de la madrugada. Poema.

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El caminante de la madrugada.

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Quisera ser caminante
que cruza en la madrugada
para poderme encontrar
con tu primera mirada,
y que tu boca me dé
también primera palabra,
con tu primera sonrisa
y verso de la mañana.

Luego montado en mi bayo
y cargando mi guitarra,
quiero darte unas canciones
en mi alegre serenata
y que me salgas sonriente
para que me des las gracias,
y si es posible me quedo
¡¡durmiendo en tu propia cama!!

Siempre me pongo a soñar
refugiado en mi cabaña,
con tus ojos amarillos
adornándote la cara,
y caminar junto a ti
hasta que el mismo sol salga,
y dejar de caminar
durante las madrugadas
y sé que la única forma
es que cuando arribe el alba
tú te encuentres convertida
en mi señora adorada.

Caminante, caminante
que en esas horas te callas,
sueña, sueña cada día
que se te dará la gracia
de ser dueño de ese amor
que en tu emoción se atraganta,
y después no va a quedarte
de caminante a ti nada.